ANTICONGELANTE REFRIGERANTE GLICOL AMARILLO

APLICACIÓN: - Sistemas de transferencia de calor donde se requiera protección a bajas temperaturas. - Especialmente recomendado para sistemas de frío industrial e instalaciones de climatización: aire acondicionado, calefacción, refrigeración, etc. PROPIEDADES Y VENTAJAS:
- Producto 100% concentrado, soluble en agua a cualquier proporción. - Máxima protección a bajas temperaturas: presenta unas excelentes propiedades anticongelantes, bajando notablemente el punto de congelación del agua. Dependiendo de la concentración, se puede alcanzar una protección hasta -57ºC.
- Elevada protección contra la corrosión: contiene una especial aditivación anticorrosiva de carácter “multimetal”, que garantiza la óptima protección de todos los metales normalmente presentes en estos sistemas: acero, fundición, aluminio, cobre, latón y soldadura.
- Buenas propiedades de transferencia de calor: posee un buen coeficiente de transferencia de calor, debido a que su conductividad térmica y calor específico son altos. - Baja viscosidad a bajas temperaturas: la viscosidad es una de las características principales de este tipo de fluidos, debido a su influencia en las propiedades de transferencia de calor y bombeabilidad a bajas temperaturas. Las disoluciones acuosas de ese producto presentan una viscosidad a bajas temperaturas inferior a la de otros fluidos de distinta naturaleza y, por consiguiente, mejores propiedades de bombeabilidad y transferencia de calor. - Superior duración en servicio: ha sido desarrollado para su empleo en sistemas industriales de transferencia de calor y, por ello, posee una aditivación “reforzada” frente a los anticongelantes convencionales para automoción. Presenta un valor alto de Reserva de Alcalinidad, muy superior al de los citados productos, lo que garantiza una mayor duración en servicio. Dicho parámetro determina la estabilidad del fluido y su duración en servicio, siendo una medida de su capacidad para mantener el pH a valores ligeramente alcalinos y, con ello, asegurar la buena protección anticorrosiva del sistema. - Baja presión de vapor: este producto aumenta el punto de ebullición del agua, reduciendo las pérdidas por evaporación. Ello permite temperaturas de servicio más altas.

MODO DE EMPLEO: Se emplea diluido en agua, preferentemente desionizada o bien destilada. Si ello no es posible, se recomienda el empleo de aguas con los límites siguientes: · DUREZA: < 100 ppm de Carbonato Cálcico (10º HF) · CORROSIVIDAD: < 50 ppm de iones Cloruro + Sulfato La concentración de empleo viene determinada en primera instancia por la protección a baja temperatura que se requiere en el sistema. En la siguiente tabla se detallan las temperaturas de protección para distintas concentraciones de uso: Temperatura Volumen de producto -57ºC 60% -47ºC 55% -38ºC 50% -30ºC 45% -25ºC 40% -20ºC 35% -16ºC 30% -12ºC 25% Así mismo, el rendimiento de transferencia de calor y la protección anticorrosiva también dependen de la concentración de empleo. En las disoluciones acuosas de este producto, cuanto menos sea la concentración del mismo, mejor transferencia de calor se obtendrá. No obstante, por otra parte, la protección a bajas temperaturas y contra la corrosión será menor. Por consiguiente, para cada sistema se debe buscar el óptimo equilibrio entre eficacia en la transferencia de calor y protección contra la congelación y corrosión. En general, la concentración mínimo de producto para ofrecer una adecuada protección anticorrosiva es del 25% (en volumen), mientras que para obtener una buena transferencia de calor, ésta no debe exceder del 65% (en volumen).